viernes, 12 de marzo de 2010

La Teta sin Óscar y Crousillat sin el 4

Hubiera sido muy bueno que la película peruana "La Teta Asustada" gane el Óscar a Mejor Película Extranjera. Sin embargo, ya ha marcado un hito de la historia del cine peruano, puesto que además de los premios que ha ganado en diversos festivales del mundo, el hecho de ser la primera película nacional nominada a los premios de la Academia ya es algo digno de resaltar.

A la vez es mejor que no la haya ganado. Porque hubiera sido el titular de todos los diarios, el pantallazo de todos los canales y el sonido de todas la radios, siempre atentas cual felino de la selva para dar un zarpazo y explotar todo lo que se pueda el tema, con tal de distraernos de la atención pública.

No es que no se quiera que haya ganado. Hubiera sido espectacular e histórico.

Pero ya habría sido utilizada como otra cortina de humo, para alejarnos de temas como los que se han destapado esta semana. Por ejemplo, el tema Crousillat y las irregularidades que precedieron a su cuestionado indulto humanitario.

Todo comenzó con la finalización del XXIII Congreso Nacional del Partido Aprista Peruano. García contaba con su candidato, Mauricio Mulder. Y había colocado todas las condiciones para que gane. Sin embargo, el partido más organizado del país le respondió al presidente, y optó por no permitirle a su protegido que continúe en el puesto de Secretario General. Por el contrario, los delegados apristas eligieron a Jorge del Castillo, quizás en mérito a que puso el pecho por el partido en sus momentos más difíciles de los últimos tiempos, durante la dictadura de Fujimori. Y porque fue el único durante el segundo régimen aprista que marcó sus distancias con el pacto infame. Y eso lo reconocen los verdaderos apristas.

La noche del domingo en la que Del Castillo se impuso, conformando una secretaría general colegiada con Omar Quezada, el ex premier manifestó que estaba en desacuerdo con el indulto al empresario José Enrique Crousillat, el mismo que recibió millones de dólares de Montesinos para apoyar al régimen de Fujimori, al que Del Castillo combatió. Al día siguiente, el mismo Quezada se mostró en la misma línea de su compañero.

Por la tarde del lunes, García tuvo que salir a decir que se había sentido "burlado" por Crousillat. Y durante la semana, el gobierno ha tenido que reconocer que han habido irregularidades en este indulto, gracias a que se ha descubierto que habían informes médicos muy cuestionados sobre la salud del empresario. Incluso puede generar crisis en el gabinete, puesto que miembros de la oposición en el Congreso han pedido la renuncia del ministro de Justicia, Aurelio Pastor.

Repito, excelente sería que "La Teta" se haya llevado el Óscar. Pero a la vez, es mejor que no haya sido así. Pporque de haber ocurrido, ya me imagino la escenita de García con Claudia Llosa y Magaly Solier en Palacio felicitándolas por su logro histórico, haciendo pompa durante toda la semana y enfriando los temas referidos a la corrupción, como la del señor Crousillat.

Y es mejor que el señor Crousillat haya pensado que estaba en la década de los '90, donde podía cojudear a medio mundo con la basura en que transformó Canal 4, vivir bajo el amparo de una dictadura, y pasear por donde se le dé la gana, olvidando que estamos en el siglo XXI, donde la tecnología todo lo puede y todo lo descubre. Como por ejemplo, sus saliditas a cafés cuando se supone que debería estar en cama, por su "delicado" estado de salud.

Y cree también que será fácil recuperar Canal 4, cuando se sabe que ya no es posible porque ahora estamos en democracia, y pese a las presiones judiciales, repito, la tecnología y el periodismo independiente lo descubren todo.

Para otra vez será, Claudia y Magaly, quienes representan lo impensable que puede lograr la mujer peruana desde la humildad y la honestidad. No puedo decir lo mismo de Crousillat, que representa lo más inmundo del empresariado. Y en cuanto a Alan, parece que terminará tan o igual de desprestigiado que en su régimen anterior.

No hay comentarios.: